Después de la reciente Cumbre Económica de San Petersburgo, en la que se dedicaron a enseñarle al mundo lo bien que se llevan, la pregunta que dejan en el aire Putin y Xi Jinping es si se ha tratado sobre todo de una táctica de negociación de China y Rusia contra la política del garrote (“big stick”) de Trump, o si verdaderamente se está consolidando entre ambos una alianza estratégica a largo plazo.
(Artículo original publicado en el Periódico Expansión, el día 25 de Junio de 2019)