«En realidad, es el respeto al sentido de la ley (natural y humana) lo que hizo posible que individuos como Vitoria se enfrentaran directamente al poder del emperador, y el sentido moral y humano de una sociedad profundamente imbuida en la religión lo que impidió que la evangelización se utilizara con el fin de justificar el Imperio»
Si se estudia con detenimiento la actitud de no pocos teólogos y humanistas del siglo XVI, y sobre todo la del propio Carlos V, ante la conquista de América y el trato a los indios, lo que llama más la atención es la preocupación moral, una sensibilidad que hoy nos resulta casi extraña por su hondura.
(Artículo original publicado en el Periódico ABC, el día 17 de Mayo de 2019)